Para que un paquete de Amazon o DHL México llegue a su destino, proveniente del Parque Industrial Cuautitlán Izcalli, Estado de México, los repartidores extreman precauciones pues están en riesgo de que les roben la carga. La zona de edificios grisáceos con tráileres en fila se ubica en una de las entidades con foco rojo por este delito recientemente tipificado como federal.
Las asociaciones de transporte de carga, que formaron un frente común contra el robo principalmente de alimentos, combustibles, autopartes y electrodomésticos, revelaron que las pérdidas sumaron 92 mil 499 millones de pesos durante el 2017, y a ello se suma la competencia desleal del mercado ilegal con sus productos robados, y la posibilidad de pérdidas humanas.
Las zonas donde se concentra el crimen son Puebla, Estado de México, Tlaxcala, Veracruz, Michoacán y Jalisco. Incluso Nuevo León. Frente a ello, la Policía Federal ofrece líneas para reportes y la SCT cámaras de videovigilancia en carreteras.
Ciudad de México, 19 de junio (SinEmbargo).– Después de la volatilidad financiera y de la demanda, la inseguridad en el país es la mayor preocupación de los empresarios durante el proceso de suministro, sobre todo en la logística y manufactura, de acuerdo con un estudio de Soy Logístico Asociación, donde figuran Levi’s, Jumex, Mabe, WalMart, Comex, Kellog’s, Bimbo, Soriana, Palacio de Hierro, entre otras firmas. El robo de transporte de carga, que aumentó un 117 por ciento durante los últimos cuatro años, se concentra en Puebla, Estado de México, Tlaxcala, Veracruz, Michoacán y Jalisco, de acuerdo con cifras oficiales y de las cámaras del sector.
Los datos de denuncias del Secretariado Ejecutivo de Seguridad Pública muestran que durante este sexenio hubo 23 mil 963 denuncias de robos a transporte de carga en esas seis entidades. De 2012 a 2017 han aumentado 1,534 por ciento en Tlaxcala; 760 por ciento en Jalisco; 585 por ciento en Michoacán; 508 por ciento en Jalisco; 360 por ciento en Puebla; y 134 por ciento en Estado de México, la entidad que concentra el mayor número de incidentes con 12 mil 641 en este periodo.
La Policía Federal tiene detectado el «corredor rojo» en Tlaxcala, Puebla y Veracruz, donde los pequeños y grandes comerciantes son víctimas. En la carretera federal que pasa por Tlaxcala, Roberto, 58 años, fue asaltado hace tres años, cuando aún el fenómeno no rebasaba cifras alarmantes. Se detuvo a acomodar la lona de su vehículo y en minutos llegó un carro con cuatro personas. Le quitaron su camioneta, donde transportaba muebles para vender como lo hace desde hace 25 años. Levantó una denuncia ante el Ministerio Público de la zona. Encontraron la unidad ya sin mercancía en Puebla. Perdió alrededor de 60 mil pesos sumado a que sus ventas bajaron un poco, pero tardaron 90 días en devolverle la unidad argumentando que se localizó en otro estado, contó vía telefónica.
«[La inseguridad] ha incrementado mucho. Los compañeros y por gente que nos conoce sabemos los puntos donde uno no se puede parar. Ya no es la misma seguridad que antes; ya no se puede uno parar en cualquier lugar, más que nada en las carreteras, por el miedo que lleguen a asaltar», dijo. No obstante, Roberto ha visto «poca» vigilancia. «Uno no puede exigir nada, porque va de paso en diferentes estados de la República. Pero si hubiera la oportunidad, le pediría más vigilancia en las carreteras».
El robo de transporte se tipificó como delito federal desde febrero de este año. La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) ha colocado videovigilancia en más de 2 mil kilómetros de las carreteras federales y tanto la Policía Federal como la Procuraduría General de Justicia (PGJ) están trabajando en coordinación con el sector.
Patricia Vizcaya Ángeles, gerente Jurídico y de Normatividad de la Asociación Nacional de Transporte de Carga (ANTP), coordina el Comité de Prevención y Combate al Delito que surgió hace alrededor de 10 años «con la necesidad» de acercar a sus socios con las autoridades estatales y federales (Secretarías de Seguridad Pública y Policía Federal) «para buscar las mejores prácticas para contener y prevenir el robo» mediante protocolos de atención inmediata.
Este delito, dijo en entrevista, se concentra en el corredor México-Veracruz en autotransporte, y en Veracruz y Guanajuato en el caso de ferrocarriles, sobre todo en alimentos, combustibles, autopartes, alcohol y misceláneas. La Agencia Reguladora de Transporte Ferroviario reportó que en el primer trimestre del año en Puebla hubo 139 robos, en Jalisco 83 y en Guanajuato 82.
Entre los socios de la ANTP están Bachoco, Gamesa, Bimbo, Barcel, Michelín, Cemento Moctezuma, Bonafont, Cemex, Sigma alimentos, La Costeña, Walmart, Danone, Lala, Grupo Modelo, Jumex, Sabritas, Kimberly Clark, Pepsico, Alpura, Coopel, entre otros.
«Hemos visto un incremento importante desde hace un par de años, y es por eso que el Comité se ha reforzado con mayores estrategias de trabajo con autoridades de todos lo niveles. Todas las autoridades han reaccionado, pero con la que mejor hemos trabajado en diversas administraciones ha sido con la Policía Federal», dijo en entrevista.
Vizcaya destacó que este fenómeno ha sido «una lección importante» para la logística del país. «En el caso de las empresas que funcionamos como generadores de carga, usuarios de carga y empresas con flota propia nos vemos afectados de distintas maneras. Nos roban la unidad (desgraciadamente puede pasar a mayores con nuestros operadores), las mercancías, tenemos lesiones físicas y psicológicas de nuestros operadores y, lo que nos distingue de nuestros compañeros de pasaje y turismo, es la competencia desleal que le hacen a nuestros productos en el mercado informal», afirmó.
Ante ello, en coordinación con la Policía Federal y la Procuraduría General de la República, aportan información sobre el rastreo de sus unidades y en ocasiones han logrado rescates en bodegas.
La semana pasada Gustavo de Hoyos Walther, dirigente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), anunció un plan emergente en conjunto con la Secretaría de Gobernación, PGR y Policía Federal para combatir la inseguridad que ha obligado a cerrar a empresas generando desempleo. «Hay casos en los cuales los grupos delictivos han querido posicionarse de las rutas de distribución, han querido cobrar por derecho de piso y amenazado a los trabajador», declaró a la prensa tras un evento de la organización.
«Tenemos que regresarlos a la sierras o donde estaban, pero no podemos permitir que tomen el mando de nuestras carreteras y empresas», aseguró el líder patronal. «Si un Gobernador no quiere dar la lucha contra la inseguridad, mejor que se vaya», sentenció en referencia a que la responsabilidad es tanto de las autoridades locales como federales.
LA ZONA INDUSTRIAL MEXIQUENSE
Durante el evento «Prevención de pérdidas en la logística» de Soy Logístico Asociación, Héctor Coronado, director de Prevención de Pérdidas de Amazon en México, expuso que la seguridad en sus centros de almacenamiento y distribución es «muy dinámica», ya que no es lo mismo salvaguardar «el que tenemos» en Tepotzotlán, Estado de México, que otros. En septiembre de 2017 Reuters reportó sobre la instalación de ese centro, pero la empresa no lo confirmó. Coronado, basado en su experiencia en Río de Janeiro, Brasil, destacó la necesidad de introducirse a las operaciones para detectar fraudes y ventas en el mercado negro.
En el Estado de México, donde Amazon tiene otro centro de almacenamiento y distribución en el Parque Industrial Tres Ríos en Cuatitlán Izcalli, hubo 3 mil 423 robos a transporte con y sin violencia denunciados durante 2017, un 53.15 por ciento más que en 2016 (2 mil 235 robos), de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Uno de los principales compromisos de campaña del Gobernador mexiquense Alfredo del Mazo Maza fue combatir la violencia. Ariel Rodríguez Polo, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) en el Estado de México, distó de la percepción de la autoridad estatal sobre una disminución en la inseguridad, por lo que le urgió a hacer un esfuerzo. «Estamos arriesgando nosotros mucho diariamente, el trabajo, la vida, el dinero», expuso a la prensa local.
La empresa estadounidense Amazon arrancó el sitio de Internet de ventas de libros electrónicos para México en 2013 y desde 2015 vende otros artículos en línea. Para 2017 se convirtió en el principal minorista de ventas en línea en el país por encima del popular Mercado Libre. Euromonitor calculó que el año pasado obtuvo 505.2 millones de dólares en ventas, más que los 243.9 millones de 2016.
Dado que Amazon detectó que a inicios de este 2018 había al menos un robo por semana en esa zona industrial mexiquense, lo cual representa una pérdida de cinco millones de pesos por unidad de traslado, creó un plan de seguridad junto con otras empresas a la redonda, detalló Héctor Coronado, director de Prevención de Pérdidas, en entrevista con T21. Esta estrategia incluye escoltas en horarios de mayor incidencia delictiva, traslado en convoy y mayor vínculo con las autoridades.
En ese parque industrial de edificios grisáceos, donde resaltan tráileres y otras unidades de transporte, también está DHL México, que envía paquetes, y una sucursal de Farmacias San Pablo. En otra zona industrial mexiquense, en Tultitlán, está un centro de la gasolinera Chevron y otra de Unilever, que maneja productos de higiene y cuidado personal. SinEmbargo solicitó un comentario a DHL México y San Pablo al respecto, pero no obtuvo respuesta.
Héctor Hugo Corona Rodríguez, gerente general de Logística para MABE México-Centroamérica e integrante del Consejo de Soy Logístico, dijo en entrevista con RadioLogística que no habían tenido un problema en seguridad y su carga de línea blanca se movía «ordenada y coordinada» sin impactos mayores.
Sin embargo, «en los recientes 18 meses –todo el año pasado y lo que va de este– hemos vivido un crecimiento desordenado en términos de inseguridad. Algo fuertemente está pasando, algo muy grave está pasando en el país, de suerte que la inseguridad está creciendo de manera muy importante», dijo Corona. «El problema está en el sureste del país, en el Golfo, en la zona de Michoacán, en el mismo Estado de México».
Por ello los embarcadores buscan «evitarlos», pero «el consumo se encuentra en esos lugares y tenemos que encontrar una solución para hacerlo».
Detalló que el transporte representa en promedio entre un 50 y un 70 por ciento del costo logístico de las empresas para que el producto llegue a su consumidor final, ya sea en medio terrestre (de carga o ferroviario), marítimo, aéreo o intermodal. «La logística es de las pocas áreas que corren a lo largo de toda la compañía», destacó Corona. «Entre más tarde el transporte en desplazarse, tiene que ver con el costo», por lo que destacó «el internet de las cosas» donde la logística no es la excepción, y una gran oportunidad es la entrega a domicilio.
COSTO DE MÁS DE 92 MIL MDP
La AMF y la @canacarmexico hablan sobre la inseguridad en el transporte de carga que, al final del día, se traduce en el encarecimiento de la logística. #XVIIIForoANTP #AltoAlRoboAlTransporte pic.twitter.com/2dCpPt6c9N
— ANTP, A.C. (@ANTPMexico) June 8, 2018
Desde noviembre de 2017, en coordinación con la Comisión Nacional de Seguridad, para combatir el robo al transporte de carga se creó un frente común compuesto por la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), la Asociación Nacional de Transporte Privado (ANTP), la Cámara Nacional del Autotransporte de Pasaje y Turismo (Canapat), la Concamin y la Conatram, en alianza con los gobiernos de Puebla, Estado de México y Veracruz, el «triángulo rojo» de robo de unidades pesadas y mercancías, con base en los datos de la Policía Federal.
El presidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), Enrique González, reveló durante un foro que los costos directos e indirectos de la inseguridad, que no agregan valor, sumaron 92 mil 499 millones de pesos durante el 2017, el 14 por ciento del PIB del sector de autotransporte en México y un 0.5 por ciento del PIB nacional.
Los alimentos y bebidas, combustibles, químicos, materiales para la construcción, electrodomésticos, electrónicos, ropa y calzado son los productos que más atraen al crimen, precisó durante un evento en Quintana Roo el pasado domingo. La industria del autotransporte, en servicios de carga, pasaje y turismo, aporta cerca del 5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país, de acuerdo con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. Integrada por una flota de 936 mil 500 unidades, emplea a más de 2 millones de mexicanos.
Las cifras de la Canacar revelan que el robo al transporte de carga ha subido un 117 por ciento en los últimos cuatro años, sobre todo de 2016 a 2017. Y sigue al alza. Durante el primer trimestre de este año, han registrado 3 mil 300 incidentes de robo a transporte de carga, 66 por ciento más que en el mismo periodo de 2017 y 108 por ciento más que en esos tres meses de 2016.
Los estados que presentan un mayor índice de robo son Puebla (22 por ciento), Estado de México (21 por ciento), Tlaxcala (11 por ciento), Michoacán (10 por ciento), por primera vez Nuevo León (8 por ciento) y Jalisco (7 por ciento), dijo el vicepresidente de Canacar Refugio Muñoz en entrevista con Milenio Televisión. En Guerrero, por el ambiente inseguro, Pepsi acaba de cerrar un centro de distribución en Ciudad Altamirano, municipio de Pungarabato, en la zona de Tierra Caliente.
Además de robos y secuestro de unidades, «hemos tenido algunos casos de pérdidas humanas, sobre todo de conductores nuestros ante la eventualidad de un retén falso, los modus operandi de estos delincuentes», dijo Muñoz de Canacar.
Para el presidente de la Canacar, Enrique González, es prioridad «reforzar los vínculos» con los gobiernos estatales y crear una Fiscalía Especializada para la Atención al robo del transporte, informó la revista de la Cámara.
El vicepresidente Refugio Muñoz destacó en la entrevista televisiva que ha faltado «coordinación entre autoridades». Desde febrero el robo a transportes ya es tipificado como un delito federal por lo que «ya no solo es responsabilidad de los gobiernos estatales, sino del gobierno federal».
La Asociación Nacional de Transporte Privado, dirigida por Alex Theissen Long y parte del frente común, también reconoce la coordinación con la Policía Federal para los reportes de robo con el fin de frenar el delito o recuperar tanto la mercancía como la unidad. Realizaron un foro este fin de semana sobre el tema en Quintana Roo. «No contar con las mínimas condiciones de seguridad nos tiene en un ambiente de incertidumbre. Es lastimoso», enfatizó Theissen frente al titular de la SCT, Gerardo Ruiz Esparza.
Frente a ello, Ruiz Esparza destacó la videovigilancia instalada en más de 2 mil kilómetros de las carreteras federales. Acompañado por la subsecretaria de Transporte de la SCT, Yuriria Mascott, y el presidente de la ANTP, aseguró que es un esfuerzo compartido entre autoridades federales –SCT, PGR, Comisión Nacional de Seguridad– y las cámaras del sector de autotransportes.